jueves, 12 de febrero de 2015

El Pueblo Hebreo


INTRODUCCIÓN: 

La historia del hombre es de gran importancia para sí mismo ya que le permite conocerse para aprender de sí mismo y mejorar. Se estudian sus esculturas, sus pinturas y técnicas, los escritos y templos y todo aquello que nos permita construir una perspectiva de su cultura. Es mediante este proceso con el cual nos adentraremos al estudio de la cultura hebrea quienes, a diferencia de otras civilizaciones, han prevalecido fieles a sus tradiciones a lo largo del tiempo gracias a una fuerte creencia o convicción: la de ser el pueblo elegido de dios.

Algunas interrogantes que nos guiarán en el trabajo son: ¿cuál es el origen del pueblo hebreo?, ¿cuáles son sus características?, ¿cuáles son los dogmas más importantes dentro de su religión?, ¿cuáles son sus textos más importantes?, ¿qué características tienen las manifestaciones artísticas de esta cultura?, ¿cuál es la relación que existe entre su arte y religión? y finalmente ¿cuáles son sus aportaciones más importantes de la humanidad?

Historia del pueblo hebreo 

Los hebreos son un antiguo pueblo semita, ancestros de los israelitas y del pueblo judío. Según la historia y las tradiciones judía y cristiana, la formación del pueblo hebreo tiene lugar durante el segundo milenio, alrededor de 1800 a.C. Son originarios de Caldea, Mesopotamia. La religión es fundamental en las acciones del pueblo y su forma de vida. La Biblia  nos dice que por 1900 a.C. Abraham, el primer patriarca,  selló un pacto con Yahvé[1] conocido como  el  “convenio Abrahámico”[2], donde éste le prometió las tierras de Canaán a cambio de que el pueblo dejase de alabar a los muchos dioses que existía en su época, tallados en piedra y esculturas  (idolatría) y prometa su fidelidad y sumisión a la voluntad de “el único Dios.” Entonces Abraham reunió a su pueblo y lo guió en el largo viaje a la tierra prometida. La idea del Dios único, por primera vez sostenida por un pueblo de la antigüedad, los convirtió en pioneros del monoteísmo. Las tierras de Canaán eran ricas y fértiles, codiciadas por una gran cantidad de pueblos. Se encontraban en medio de los dos más grandes pueblos de esa época: Egipto al norte de África y Babilonia en la Mesopotamia.




Finalmente, los hebreos se establecieron ahí. Al morir Abraham, su primogénito, Isaac, ocupó el lugar de patriarca. El primogénito de éste, Jacobo, es principalmente conocido por haber tenido 12 hijos varones. Cada hijo fue patriarca de su tribu. Estas tribus son conocidas como las 12 tribus originarias.












Cautiverio en Egipto 

José, patriarca de tenía premoniciones y una de ellas provocó que sus hermanos lo desterraran y vendieran a un comerciante Egipcio. Sin embargo, fue nombrado consejero del faraón cuando escuchó de su habilidad de predecir el futuro y que vendrían 7 años de hambruna. En el siglo XIV a.C. parte de los hebreos establecidos en Canaan emigraron a Egipto debido a la hambruna que asoló la región. Fueron recibidos, sin embargo, los egipcios veían peligro en ellos y fueron esclavizados. Inicialmente realizaron diversos trabajos, luego formaron parte del sistema de corvea, mediante el cual quienes no podían pagar los tributos con la cosecha debían hacerlo con su trabajo, por lo cual debían trabajar para el Faraón.

El Éxodo

Hacia el siglo XIII a.C. se rebelaron y regresaron a Canaán, bajo la guía de Moisés. La salida de Egipto y posterior travesía por el desierto se conocen como el Éxodo del pueblo hebreo.


Tabernáculo


Según relata la Biblia, el Tabernáculo, fue el santuario móvil construido por los israelitas bajo las instrucciones dadas por Dios a Moisés en el Monte Sinaí.

El Tabernáculo es también conocido como Tienda del Encuentro y fue un santuario itinerante dedicado a Yavheh.

Menorá



Su referencia se encuentra en la Biblia. Es un candelabro de oro purísimo, labrado a martillo que tenía siete brazos, en cada uno de los cuales ardía una lamparilla o luminaria. Es uno de los elementos rituales más importantes del judaísmo y asimismo uno de sus símbolos más antiguos, remontándose su uso al pueblo hebreo acampado al pie del monte Sinaí y en su Éxodo rumbo a la Tierra Prometida, en tiempos de la Edad Antigua.

El Arca de la Alianza 


Los hebreos protegieron las tablas en el Arca de la Alianza y las transportaron a lo largo del desierto.

El arca representó durante su existencia la presencia de Dios, quien prometió: “Allí ciertamente me presentaré a ti, y hablaré contigo desde más arriba de la cubierta, desde entre los dos querubines que están sobre el arca del testimonio”. Éx 25:22





El regreso a Jerusalén - construcción del Templo de Salomón

Una vez que los descendientes de las 12 tribus originarias regresaron a Jerusalén, inició el periodo más esplendoroso de la cultura hebrea: el periodo de los reyes. El hecho de que el pueblo decidiera tener como gobernante a un rey, surgió por la necesidad de unificarse y defenderse contra sus enemigos, los filisteos en la costa y de los nómades del desierto. Saúl sería el primer rey hebreo, quien se suicidaría después de una humillante derrota. Le sucedería David, quien había matado al gigante Goliat con una piedra. En el año 966 a.C. David moriría y en su lugar sería coronado Salomón.

Salomón dedicó toda su vida a la construcción del Templo de Jerusalén, un templo dedicado a ese único dios. En esos momentos los hebreos ya poseían un gran ejército, una administración y un gobierno centralizado.
El Templo de Jerusalén fue el santuario principal del pueblo hebreo, construido por Salomón, y contenía en su interior el Arca de la Alianza, el candelabro de los siete brazos (Menorá) y demás utensilios empleados para llevar a cabo el culto hebraico en tiempos antiguos.

Fue construido para sustituir al Tabernáculo como único centro de culto para el pueblo judío.



La primera diáspora 

En el año 922 a.C. murió Salomón, y como consecuencia, ocurriría la división de la monarquía en dos reinos, ya que las 12 tribus no se ponían de acuerdo sobre cómo defender sus tierras: el reino de Israel, al norte con su capital en Samaria formado por diez tribus y reino de Judea, al sur, constituida por dos tribus y como Jerusalén como su capital. En el año 721 a.C. el reino de Israel sería conquistada por los asirios y aproximadamente doscientos años después el reino de Judá fue conquistado por los babilonios al mando del rey Nabucodonosor II (562 a.C.). El rey babilónico destruyó el Templo de Jerusalén y expulsó a los hebreos a Babilonia. En la Biblia, se recuerda este periodo oscuro como la primera diáspora. Durante estos años las disputas entre las tribus fueron quedando en el olvido, y todos los descendientes de Abraham pasaron a llamarse por igual: el pueblo judío. Pero debieron esperar 50 años, hasta que en el 539 a.C. fueron liberados por los persas y lograron regresar a la ciudad sagrada de Jerusalén, donde reconstruyeron el templo de Salomón.

Conquista de Nabucodonosor II
Ubicación del reino de Judá y el reino de Israel.

Todas esto volvió su relación más fuerte y poco a poco decidieron alejarse de la civilización, convencidos de que su único dios era la única verdad. Para ello, los profetas advirtieron durante muchos años los mandatos sagrados de las primeras cinco partes de la biblia, a la que llamaron Torá. 

TORÁ

El término proviene de la raíz hebrea .י.ר.ה (Y.R.H.), que significa "acometer" y se halla etimológicamente ligado a las nociones de ley, enseñanza e instrucción. Son los cinco libros que escribió Moisés. Informa la voluntad del creador y han de cumplirla.
Entre judíos, se considera que la Torá es el creador compartiendo sus deseos con sus creaciones.
Los sabios judíos afirman que la existencia del cosmos depende de la Torá.


La Gran Diáspora 

Por más de 200 años los judíos se dedicaron a consolidar su religión, su cultura y su forma de vida de acuerdo a las enseñanzas de la vida. Pero sufrieron nuevas invasiones de dos grandes civilizaciones: los griegos, bajo las ordenes de Alejandro Magno (356 a.C. - 323a.C.) y los romanos. En el sigo I d.C. los judíos decidieron sublevarse y rebelarse, pero después de 2 años de hambre y lucha, Jerusalén cayó. Tito (39 d.C. – 81 d.C.) el emperador romano, mandó a destruir el templo que construyó Salomón y a quemar toda Jerusalén. Los pocos que sobrevivieron se dispersaron por todo el mundo en busca de un lugar en donde vivir. Una vez más, los judíos fueron un pueblo sin patria. Un gran grupo de ellos se dirigió a la península Ibérica pasando por el norte de África, y ese fue el inicio de una nueva vida. 


A estos judíos se les llamó: Sefaradíes, y vivieron muchos años ahí. Sin embargo, en el siglo XV fueron expulsados por los reinos católicos de España y Portugal que veían en ellos una amenaza a sus creencias. Los Sefaradíes tuvieron que dispersarse nuevamente. Durante los siglos siguientes, los judíos siguieron huyendo y soñando con regresar a la tierra de Canaán. Varias veces, rabinos han intentado llamar a todos los judíos para que recuperen su tierra sagrada, pero la gran diáspora que vive el pueblo judío hace de esto imposible.

En la actualidad, el pueblo judío, después de haber sufrido diferentes dominaciones, se encuentra establecido en parte del territorio de Palestina, como resultado del esfuerzo realizado los Sionistas[3] para obtener un territorio. Este territorio fue establecido después de la Segunda Mundial en 1948 y se conoce como Estado de Israel, con su capital en Jerusalén. Éste ha contando con la oposición de los estados árabes vecinos y desde entonces ha tenido una serie de enfrentamientos bélicos con sus vecinos los árabes, como las de 1949, 1956 y 1973. En la actualidad, se encuentra en conflicto con los palestinos que reclaman su territorio; a pesar de esto, Israel ha alcanzado apreciable desarrollo en lo político, social y económico.





 SOCIEDAD


El núcleo de la sociedad hebrea es la familia patriarcal. El padre es la máxima autoridad, con marcada superioridad del hombre sobre la mujer. En los templos, por ejemplo, hombres y mujeres poseen lugares diferenciales de ubicación.

Fuertemente influenciados por el pensamiento religioso, el pueblo hebreo mantenía una creencia monoteísta fundada en el culto del dios Yahvé. Siguiendo el liderazgo de los hombres designados por Yahvé, los hebreos se juzgaron a sí mismos como una nación santa que debía mantenerse y expandir su población. Debido a esto, las familias eran muy extensas y la mujer tuvo que lidiar con la función primordial de la crianza de sus hijos. Los hombres ocuparon puestos de liderazgo en la administración de las tribus y las mujeres se prepararon para el matrimonio. Siguiendo normas morales muy estrictas, los hebreos evitaron el vínculo sexual entre los más jóvenes y condenaron la práctica homosexual. Además, la virginidad también jugaba un papel importante en la reafirmación del ideal de pureza de la figura femenina. El enlace monogámico era clave en la estructura familiar. Los hombres solamente podrían disfrutar del placer de otra mujer (concubina) cuando la esposa no fuera capaz de proporcionar hijos.

Existían también los esclavos, los cuales se obtenían por compra o por ser prisioneros de guerra, no obstante, no se los trataba con crueldad. En los tiempos de nómades, los hebreos vivían en tiendas con pocos muebles. Esta forma de vida les facilitaba su traslado en búsqueda de pasturas para sus rebaños. Luego de asentarse en Palestina, habitaron en casas de piedra rodeadas de huertos, conformando poblados. 



Vestimenta



El Talit es un accesorio religioso judío en forma de chal utilizado en los servicios religiosos del judaísmo. Se usa únicamente durante el día. Los flecos se llaman Tzitzit.
Su origen bíblico nos ubica en el Éxodo, cuando los dos millones y medio de judios no cabían en la Tienda de testimonio que construyó Moisés para hablar con dios, por lo que necesitaban su propios santuarios para conversar con él.
Al colocarlo sobre la cabeza, simula una tienda, donde oraban y alababan. 



La Kipa es una pequeña gorra que cubre la cabeza de los varones, como símbolo de respeto, siendo de uso obligatorio en lugares sagrados. Se debe de cubrir uno frente al Señor.
Los tefilín, simbolizan la salida del pueblo hebreo de Egipto. Los usan los varones a partir del bar Mitzbá (13 años). 

Tradiciones

El sábado es el día más importante de la semana, es día de descanso, así como lo realizó Yahvé.
La boda tiene una importancia simbólica en la cultura judía. Ahí se rompe una copa para recordar que una alegría jamás estará completa hasta la reconstrucción del templo.
El rabino recita 7 bendiciones, y en la última, pide el pronto regreso del pueblo a Canáan.



ARTE JUDIO Y RELIGIÓN

En la primera parte del trabajo hicimos mención de la historia del pueblo judío, ya que, de esta manera, se comprende mejor la relación de la comunidad entre sí y sus tradiciones. El arte es el siguiente punto a examinar. 

El texto que nos permitirá entrar a este aspecto será La Biblia. La Biblia da testimonio del arte inicial desarrollado por los descendientes de los patriarcas hebreos. El segundo mandamiento dice: “No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra.”[4] Esta única sentencia bíblica es el sólido sustento de que el arte judío creado por artistas judíos es un género relativamente nuevo. Por ello, contrario a la opinión popular, el arte judío y sus creadores tienen existencia desde los tiempos bíblicos, y los artistas judíos, desde entonces, han obedecido este mandamiento manufacturando obras cuya expresión es ser obras de arte ritual. 

 La prohibición bíblica ha sido y es interpretada por las autoridades religiosas hebreas particularmente en lo que concierne a objetos tallados, ídolos o imágenes realizadas para rendirles culto. Sin embargo, no se opusieron al embellecimiento de los objetos rituales empleados en el culto o la liturgia en tanto que implementos o utensilios, así como también decoraciones u ornamentos, todos ellos destinados a glorificar y exaltar al único dios.

Los judíos han constantemente producido o hecho uso de objetos que de algún modo resultaban agradables a su sentido estético. En un pasaje famoso (Éxodo 15:2)[5], los rabinos establecieron que todo aquello dedicado al culto de Dios debería ser adornado mediante el empleo de implementos hermosos destinados a las prácticas y observancias religiosas.
A las colecciones de objetos judíos artísticamente concebidos para fines rituales se les denomina “Judaica”.
Arte judio en la Edad Antigua: Tabernáculo, Templo de Jerusalén, Arca de la Alianza y Menorá


ARCA DE LA ALIANZA




TEMPLO DE SALOMÓN




El Templo de Jerusalén según la visión del profeta Ezequiel. Perspectiva de Charles Chipiez, 1887

Interior del Templo
Fotografía actual de las ruinas del Templo de Salomón
Fotografía actual de las ruinas del Templo de Salomón



Domo de la Roca


Aunque no sea una mezquita en el sentido estricto del término, el Domo de la Roca es indudablemente un lugar de veneración para los musulmanes. El edificio islámico alberga la así llamada "Roca Fundacional", cuya significación es de suma importancia tanto para el credo hebreo como musulmán.


La Roca Fundacional es reverenciada por numerosos monoteístas como el lugar donde Abraham iba a sacrificar a su hijo; sobre dicha formación pétrea se ubicaba el recinto más sagrado del Templo de Salomón; y en ese mismo sitio, siglos después de la destruccción del Templo y según sostiene la tradición islámica, el profeta Mahoma ascendió a los cielos, siendo portado por buraq, caballo alado con cabeza humana que allí lo condujo en una "travesía nocturna".
Presenta asímismo la Roca Fundacional una importante impronta que, según la tradición islámica, fue hecha por Buraq al ascender a los cielos o, según otra versión islámica, el arcángel Gabriel grabó en la Roca la mencionada impronta. Un hueco bajo la roca, sostiene la tradición musulmana, es reminiscente del turbante de Mahoma, quien, al levantarse, reincorporándose después de haber orado, se habría golpeado la cabeza con la piedra de no haberse ésta reblandecido instantáneamente.
Considerado también santo por los hebreos, el lugar en cuestión es no menos venerado por los musulmanes, quienes construyeron el Domo de la Roca para preservar dicho sitio y lo que el mismo involucra, dado que es sumamente significativo desde un punto de vista monoteísta.
Debido a su valor histórico y simbólico, la Cúpula de la Roca figura como una imagen constante y dominante en numerosas representaciones de la cultura islámica.
Para los musulmanes incluso las gradas del Domo de la Roca poseen un valor simbólico importante. Ocho gradas que mueren bajo unas arcadas conducen desde cuatro lados hacia lo alto de la Cúpula de la Roca; los musulmanes llaman a estas arcadas "mavazin", las balanzas. Según una leyenda islámica, el día del Juicio Final se tenderá una cerda de caballo desde las "balanzas" al Monte de los Olivos y todos los resucitados deberán pasar por sobre ella: quien haya cometido injusticias caerá a la perdición eterna.

APORTACIONES


Bien, en esta sección realizaremos una recopilación del trabajo y haremos mención de las aportaciones que consideramos las más importantes a la cultura universal:

  • ·      Iniciadores de una religión monoteísta, idea que influirá en diversas religiones.
  • ·      Origen de las tres grandes religiones actuales: judaísmo, cristianismo e islamismo.
  • ·      Religión hebrea: fue espiritualista y moralista. Exigió la practica del bien de lo noble, lo justo y lo humano.
  • ·      La Biblia- es el libro Sagrado Divino y humano del mundo Cristiano. Estos principios morales y religiosos sirven de base para el cristianismo.
  • ·      El Decálogo- en el antiguo testamento se encuentra el decálogo o los 10 mandamientos de la ley de Dios, llamadas tablas de la ley que Jehová dictó a Moisés.
  • ·      El Antiguo testamento - está escritos por los hebreos. Habla de las costumbres y pensamientos morales de los israelitas.
  • ·      El hombre es inferior a Dios, pues lo hizo a su imagen, pero como ha pecado debe ser castigado y sufrir hasta su muerte donde se reunirá con Él.
  • ·      Estructura familiar patriarca: el padre es el encargado de ve por su familia y la mujer debe encargarse de cuidar el hogar y los hijos.
  • ·      Está proscrito representar a Dios, por ello se dice que no tiene forma ni figura.

VI. Conclusión

Muchos pueblos que sufrieron persecuciones similares finalmente desaparecieron, pero esto no le sucedió al pueblo hebreo, el cual logró sobrevivir gracias a su fuerza interior, a su capacidad de superación en situaciones extremas y a la lectura de la Torá, que describe los mandatos de ese Dios único e intangible que los había elegido. La comunidad se encuentra dispersa por todo el mundo, y algún día, se dice, que todos recuperarán su Tierra Prometida y reconstruirán el Templo de Salomón. Sus manifestaciones artísticas están sujetas a dogmas establecidos en los antiguos textos, aunque se ha logrado abrir las posibilidades para el artista judío.



[1] A lo largo de este trabajo se mencionará al dios único en el cual creía el pueblo hebreo como Yahvé o Jehová. Ambos nombres son correctos pero varía el uso en distintos textos o épocas.
[2] « Deja tu tierra natal y la casa de tu padre, y ve al país que yo te mostraré. Yo haré de ti una gran nación y te bendeciré; engrandeceré tu nombre y serás una bendición. Bendeciré a los que te bendigan y maldeciré al que te maldiga, y por ti se bendecirán todos los pueblos de la tierra ». —Génesis 12:1-3.
[3] El sionismo es un movimiento político internacional que propugnó desde sus inicios el restablecimiento de una patria para el pueblo judío en la Tierra de Israel. Dicho movimiento fue el promotor y responsable en gran medida de la fundación del moderno Estado de Israel.
[4] Éxodo 20:4
[5] “Jehová es mi fortaleza y mi cántico, Y ha sido mi salvación. Este es mi Dios, y lo alabaré; Dios de mi padre, y lo enalteceré.”

Bibliografía

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